Descanso y entrenamiento


El descanso es una parte fundamental del entrenamiento que se suele descuidar, quizá por creer que hacer ejercicio todos los días nos va a garantizar mejores resultados.
Nada más lejos de la realidad.

Cuando nos ejercitamos, los músculos son sometidos a un esfuerzo extra que posibilita su desarrollo, pero para que sea realmente efectivo, es necesaria la segunda parte que complementa a este esfuerzo:

El descanso. ¿Por qué? porque la forma que tiene el músculo de recuperarse es mediante el descanso y es en esta fase donde se produce su desarrollo. A través de él, relajamos la tensión de nuestros músculos después del trabajo físico al que los hemos expuesto, preparándolos para el próximo entrenamiento, en el que notaremos un mayor rendimiento.


Es necesario, también, llevar una alimentación saludable cuando hacemos los períodos de descanso (Realmente siempre es necesario alimentarse de forma correcta) ya que los nutrientes contribuyen, de manera importante, en la reparación de las microinflamaciones que se producen en los músculos durante la actividad física. Además, nuestros resultados serán siempre más espectaculares si llevamos una alimentación equilibrada.

Por lo tanto, si queremos que nuestro entrenamiento sea totalmente efectivo, debemos descansar.
Lo recomendable es dejar pasar 48 horas para volver a entrenar un mismo grupo muscular.


Ya sabéis la fórmula para conseguir unos buenos resultados con vuestro entrenamiento:

(Ejercicio + Alimentación + Descanso) x CONSTANCIA











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